Rituales para que el nuevo año vibre en abundancia
Cómo limpiar y activar la casa, despedir las energías del año que se va y arrancar uno nuevo, livianos y vitales.
Directora del Centro de Feng Shui Profesional
Estas fechas de transición anual están colmadas de energía y emociones. Aunque no nos lo propongamos, realizamos un balance anual y notamos que algunas experiencias dejaron más peso que otras, mientras que lo que está por venir gana foco de atención. Desde antaño, los seres humanos atravesamos estos pasajes con limpiezas y rituales que ayudan a liberarse de cargas y a afrontar con actitud positiva lo que se desea concretar.
Nuestros hogares se han impregnado con las emociones generadas a lo largo del año. Las casas tienen memoria, funcionan como esponjas y proyectan nuestros miedos, alegrías y tristezas. Por todo esto, antes de iniciar el nuevo año, será saludable reservar momentos para hacer limpiezas que nos ayudarán a tomar consciencia de que necesitamos soltar situaciones y cerrar etapas.
Poner en orden el papelerío, tirar boletas viejas y pagar las que se adeudan servirán para liberar la mente de preocupaciones y pendientes. Además, hora de revisar roperos y cajones, y hacer bolsas con lo que está para donar y reciclar, y así abrir lugar a nuevas energías renovadas. También es recomendable reparar griferías, humedades y desperfectos eléctricos.
Rituales de prosperidad
La celebración de pequeños rituales moviliza el poder de concreción de nuestro inconsciente, destierra creencias e instala otras. Su lenguaje simbólico tiene la capacidad de ayudarnos a crear aquello que estamos representando.
Un simple ritual para indicar que las energías del año viejo se retiran de la casa es abrir todas las puertas y ventanas del hogar a la medianoche del 31 de diciembre. Simbólicamente, estaremos informando al universo que soltamos lo del año viejo.
Limpiar los pisos con una mezcla de dos partes de agua y una de vinagre blanco -incluso los de madera- eliminará cualquier residuo de larva energética. Las sahumadas con hierbas purifican a través del humo todos los ambientes. Podemos usar jengibre en polvo y alcanfor y menta para quitar adherencias con el humo de la quema.
Para atraer prosperidad y habilitar el merecimiento, podemos tomar un frasco de boca ancha con tapa y colocar sal gruesa o del Himalaya en su base. Luego, introducir 12 monedas de un dólar y escribir en cinco papeles diferentes los deseos que tenemos para el año entrante. La condición será formularlos en tiempo presente, por ejemplo: “estoy feliz en Bali”. Estos deseos no deben ser comentados a otros, para que no se disperse la energía creadora. Luego, debemos cerrar el recipiente hasta el 4 de febrero del año siguiente, fecha en la que se renovará el ritual.
El 8 representa el número del infinito y de mayor poder de concreción económica. Así que, otro ritual recomendado es el de colocar ocho monedas debajo del felpudo de la puerta de ingreso a la casa para informarle al universo que el hogar está dispuesto a atraer y recibir el dinero.
Otra opción será tomar un billete de alto valor, sostenerlo en la mano y afirmar: “Desde hoy y para siempre te acepto y te recibo con todo el amor para crear cosas maravillosas y ayudar a los demás”. Luego, colocarlo enrollado dentro de la boca del Pi Yao o en la mesa de luz, dentro de un sobre rojo con nuestro nombre completo.
El ritual del jarrón del dinero
Esta antigua tradición china se usa para atraer abundancia y eliminar los obstáculos que alejan de la prosperidad. Se usa un jarrón chino o similar, es decir, panzón de boca ancha. Es ideal que tenga tapa pero, si no la tiene, será importante cerrarlo con telas de cinco colores atadas con una cinta para que la energía no se disperse.
Los pasos del armado son:
- Limpiar el jarrón con agua y vinagre y secar.
- Colocar arroz seco en el fondo.
- Luego, cinco gemas (piedras/cristales) de cinco colores diferentes (rojiza, verde, beige, blanca, azul) en representación de las cinco energías elementales (fuego, madera, tierra, metal, agua).
- Sumar nueve monedas chinas para que siempre haya riqueza.
- Además, un Buda sonriente, en representación de todos los aspectos de la abundancia y un Kuan Kong, para proteger la energía.
- Y también billetes o monedas locales y de otros países de curso legal, que refieren al disfrute en los viajes.
Directora del Centro de Feng Shui Profesional