Viajes

Eco Resort cinco estrellas en St. Barth

En uno de los destinos caribeños más exclusivos y deseados, el Hotel Manapany ofrece una experiencia diferente para disfrutar de la más glamourosa de las islas de las Antillas francesas desde una óptica terrenal y de compromiso ecológico.

Corazón de montañas, costa de arena blanca y aguas turquesa. La geografía de St. Barth es pintoresca y apacible. Mega yates, restaurantes de alto rango y boutiques de las casas de indumentaria y accesorios más refinadas del mundo la convierten en una de las postales de sello caribeño preferidas por celebridades y viajeros de élite.

A pocas cuadras de Gustavia, capital reconocida por su puerto y centro histórico poblado de tiendas de la talla de Louis Vuitton, Hermes y Cartier, se encuentra el hotel boutique Manapany, una propuesta eco friendly que al instante se percibe como un oasis de bienestar y tranquilidad. Se trata de un spot lo suficientemente cercano para adentrarse en el deleite de las compras tax free, el descorche desenfrenado de rosé y la ajetreada vida nocturna que la isla propone, mientras que, a su vez, se encuentra perfectamente aislado para desconectarse y dejarse envolver por la naturaleza.

Diseñado por François Champsaur con elementos nobles como la madera y las fibras naturales, Hotel Manapany cuenta con un particular estilo caribeño ensamblado con ambientación de diseño francés, alta gastronomía y cálido staff.

El resort tiene una cierta línea bohemia y low key, una invitación a bajar el ritmo y conectarse con uno mismo, con lo básico. Durante mi estadía en una suite prestige idílica  ubicada en la primera línea de la playa, los sentimientos de comodidad y bienestar me invadieron de inmediato. En esta suerte de cabaña rústica chic de una habitación con cama king, sala de estar, ducha y bañera, me acosté y me levanté escuchando el ondisonante rugido del mar. Una hermosa terraza privada de 25m2, ducha al aire libre y dos camastros directamente enfrente al océano completaron mis días de lectura y escritura en el paraíso.

Cada una de las 43 villas y habitaciones está ubicadas en dirección a la playa privada en Anse des Cayes, algunas sobre la arena y entre los frondosos jardines, y otras a lo alto de una pintoresca cumbre que forma parte de las instalaciones del hotel. Todas están decoradas en diferentes paletas, permitiendo a los huéspedes distenderse en sus amplios balcones. Estas casitas isleñas son la utopía tropical en su máxima expresión.

En Manapany, la playa, la propuesta de descanso y el ambiente relajado se completan con una exquisita culinaria de primer nivel. A través de su restaurante y bar de iluminación tenue y mesas bajo las estrellas, es posible disfrutar de una auténtica cocina caribeña y mediterránea de inspiración local, en un menú atravesado por alimentos frescos, productos orgánicos, locales, pescados y langostas recién salidas del mar. Una verdadera experiencia island chic.

Imágenes cortesía Hotel Manapany

El Spa Manapany fue uno de mis lugares preferidos del resort. Disfruté cada mañana de una clase de yoga o pilates, seguida de unos largos en la piscina conjunta al mar, y de un masaje intenso, desde el cuero cabelludo hasta la planta de los pies para eliminar contracturas en músculos específicos. El fin del spa es brindar una propuesta de bienestar integral mediante una colección de tratamientos bioestéticos, corporales y orgánicos, con el uso de productos Dr. Haushka.

Manapany forma parte del grupo hospitalario B Signature, y obtuvo la etiqueta Green Key a finales de 2021, gracias a sus constantes esfuerzos por ser respetuosos con la naturaleza. Agua caliente producida con energía solar, reciclaje, desalación del agua de mar, no utilización de productos químicos, iluminación 100 por ciento LED, tarjeta de ahorro de energía en las habitaciones, vehículos eléctricos y toallas de fibra de bambú son solo algunas de las iniciativas que lleva adelante el hotel para cumplir con su lema: ser parte de la naturaleza y conservarla lo máximo posible.

El destino es un sueño y, el hotel, un encanto en el que, incluso, es posible casarse. Para todo viajero que busque descansar, disfrutar de un entorno natural y sentir la atmósfera del Caribe de lujo, la dupla St.Barth y Manapany será inigualable.

  • DETALLES INOLVIDABLES:
    . Al momento del check-in se entrega a cada huésped una botella de agua reutilizable divina, que la recepción se encarga de rellenar cada vez que sea necesario.
    . Adorables postales de estilo tropical y escritas a mano forman parte de la comunicación entre la recepción y los huéspedes. ¡Por supuesto de papel reciclable!
    . Pájaros exóticos y tortugas de tierra forman parte de la fauna en The Manapany. ¡Es muy común estar almorzando y que se acerquen tortugas amistosas por la arena!

Más información: hotelmanapany-stbarth.com