Kimpton Grand Roatan Resort & Spa, utopía isleña
Con vuelos directos desde Miami, Roatán es una isla de Honduras que tiene toda la potencia de la naturaleza por explorar. Allí, Kimpton Grand Roatan es un novedoso hotel y spa de lujo para una estancia inolvidable.
El Caribe es un paraíso inagotable. Las islas que lo habitan, algunas más exploradas y otras aún misteriosas, forman un mapa de belleza onírica. En ese salpicado de tierras en medio del mar, Roatán, perteneciente a Honduras, es un territorio de ochenta y tres kilómetros. Un tesoro escondido que alberga exuberantes selvas, impresionantes arrecifes de coral y playas de arena blanca que refractan el sol. Allí, en el corazón de esta maravilla tropical, se encuentra el Kimpton Grand Roatan Resort & Spa, un nuevo hotel que ofrece la oportunidad de descubrir la isla en un entorno de confort, alta gastronomía y relax com nuca se ha visto en el país centroamericano.
Desde Miami, en un vuelo directo de tan solo dos horas, llegamos al Aeropuerto Internacional Juan Manuel Gálvez de Roatán. Luego de un breve recorrido en auto, comenzamos a deslumbrar la edificación única del hotel entre senderos tropicales bordeados de árboles y, desde ese momento, supimos que nuestra estadía sería especial.
Considerado el primer hotel cinco estrellas de Honduras, Kimpton Grand Roatan Resort & Spa abrió sus puertas hace menos de un año. Está ubicado en la pintoresca playa de West Bay, donde se concentran la mayoría de los turistas. Sin embargo, el hotel consigue estar semi aislado por un espectacular acantilado que cae hacia la playa que, a su vez, le aporta un acceso privilegiado al Arrecife Mesoamericano.
El imponente lobby de concepto abierto, con vistas directas a la selva y a las
brillantes aguas del océano, exhibe una perfecta combinación de mobiliario estiloso, rústico y ecléctico: un claro anticipo al exquisito diseño interior que se traslada a cada punto del resort.
Este paraíso arquitectónico enclavado en la naturaleza cuenta con habitaciones distribuídas entre suites, bungalows y condominios que destacan por su impecable sofisticación chic y relajada. Nos hospedamos en una habitación King Premium, con un amplio balcón esquinero con una piscina de inmersión al aire libre que fue el spot elegido cada tarde para disfrutar de la serena vista de los atardeceres de la isla.Lámparas tejidas a mano y elementos en madera y cuero junto piezas de arte y muebles elaborados en la isla y por comunidades cercanas son parte de los elegidos por la firma de interiorismo californiana Theresa Fatino Design y el equipo de diseño de Kimpton que, sin dudas, rinden homenaje a la cultura local y centroamericana a través de toques artesanales en cada espacio.
Si bien el interior del hotel es un deleite para ser disfrutado, Roatán es principalmente un destino para amantes del mar y todo lo que su naturaleza ofrece.
El sector exterior del resort, con sus piscinas y senderos en la selva, son una invitación perfecta a experimentar la isla al aire libre. Esta área del Caribe es conocida por contener la segunda barrera de coral más grande del mundo, un deleite para los amantes del esnórquel, el buceo y la pesca. A su vez, el hotel ofrece actividades acuáticas y equipos de cortesía para niños y adultos para que los huéspedes puedan explorar al máximo. Las playas de arena blanca enmarcadas en un mar que por ser extremadamente cristalino permite apreciar las diferentes especies de peces a solo pasos de nuestras tumbonas son uno de los destacados de nuestra estadía. Sesiones de yoga, paseos en kayak con fondo transparente de uso libre, djs en vivo junto al mar y un ritual diario con tarjetas de intención al caer el sol fueron otras de las actividades que permanecerán intactas en nuestra memoria.
En tanto, la gastronomía acompaña a la perfección el escenario. Dirigidos por el Chef Ejecutivo, Israel Navarro, Kimpton Grand Roatan Resort & Spa cuenta con cuatro restaurantes y bares. Alera es un elegante espacio que sirve una fusión de cocina mediterránea con productos frescos, pescado local y brunch los domingos. Está abierto durante el desayuno y la cena, todos los días. Mientras que Vos Café & Bar ofrece un completo programa de café por la mañana y, por las noches, deliciosos cócteles artesanales. Sea Cat está enmarcado por imponentes vistas al océano y se pueden ordenar clásicos de playa como tacos de pescado y ceviche fresco. Por último, The Drop Off, ubicado frente al arrecife, destaca por sus cócteles artesanales y bocadillos de mariscos a la parrilla. Desde sus mesas y hamacas pueden contemplarse los atardeceres de la isla en compañía de música en vivo: una postal idílica.
El ritmo del mar, las caminatas por la playa y el sonido de la selva invita inmediatamente a la relajación, una forma de estar que se potencia en el Kao Kamasa Spa, un espectacular y premiado espacio de más de diez mil quinientos pies cuadrados, que alberga salas individuales y suites para parejas al aire libre, una sala de Temazcal y una piscina infinita con fondo de cristal entre la selva. Antes y después de un tratamiento, es imprescindible sumergirse en sus kao-piscinas interiores, cada una diseñada con terapia de colores, variaciones de salinidad y gradientes de temperatura, sin dudas uno de los imperdibles que ofrece el hotel.
En Kay Kamasa Spa, el pasado ancestral convive con el lujo moderno, ofreciendo un menú de experiencias inspiradas en las tradiciones culturales de los Pesh: un grupo étnico indígena hondureño oriundo del noroeste del país.
Durante nuestra visita, tuve la oportunidad de experimentar el ritual aroma de piedra de cuarzo rosada, el cual resultó no solo purificador, sino profundamente enraizante. Este tratamiento modernizado basado en frutas y flores de Roatán, como son la hierba de limón calmante y el cedro desintoxicante, comienza con una
limpieza de cuerpo completo en la Sala del Jaguar: un temazcal moderno frente al mar con un imponente mural del animal selvático, considerado un chamán para los Pesh, quienes le atribuían poderes sobrenaturales y propiedades curativas.
Una envoltura de masa de barro de hierbas que promueve el rejuvenecimiento, junto a masajes de cuero cabelludo y corporales, son los pasos siguientes para adentrarnos
en una relajación completa. El tratamiento, de ciento veinte minutos de duración, concluye con una máscara facial y una técnica de balanceo única que introduce una onda suave para unificar el cuerpo y la mente y liberar así las tensiones restantes. Las piedras de palmera del cuarzo de rosa se usan en este tratamiento para traer una sensación de paz y amor incondicional. Fue una experiencia de renovación que sentí tanto física como espiritualmente liberadora y altamente recomendable.+ @kao_kamasa_spa
El servicio y la auténtica simpatía y atención al detalle del staff del hotel completan una estancia épica. El concerge provee todos los detalles para aquellos que deseen explorar restaurantes o actividades en la isla, además de transporte sin cargo en un radio de tres millas durante las noches.
A veces, un hotel es tan especial que se convierte en un destino por sí solo. Este es el caso del Kimpton Grand Roatan Resort & Spa: una utopía moderna enclavada en una pequeña isla caribeña no tan explorada como algunas de sus vecinas, que está listo para recibirlos con confort, naturaleza, gastronomía y buena vida.